HDF-Nederlands Dans Theater

Están desde la primera hora

La compañía dirigida por Paul Lightfoot presentó dos estrenos y una reposición. El primero a cargo de Marco Goecke, luego, “Double You” de Jirí Kylián, creada en 1994, y una obra de Crystal Pite, coreógrafa asociada del NDT.

Deja un comentario Por () | 01/03/2012

Uno de los estrenos, “Solo Echo”, estuvo a cargo de Crystal Pite, coreógrafa asociada del NDT. Foto gentileza HDF.

El Nederlands Dans Theater, compañía dirigida por Paul Lightfoot, luego del largo reinado de Jirí Kylián, participa desde la primera hora en el festival. Su casa, el Lucent Theater, sirve de escenario para algunas de las compañías que se presentan en este evento.
El NDT 1 ofreció dos estrenos y una reposición. El primero a cargo de Marco Goecke, “Garbo Laughs”. Goecke es un nuevo concepto en este cosmos. Cuando uno se creía que ya estaba todo (re) inventado… pues no. Claro que nada sale de la nada, pero los hay más y menos innovadores Y él es uno de ellos.
La danza de Goecke se caracteriza por sus movimientos geométricos y dinámicos. Las extremidades juegan un papel líder: círculos, triángulos o líneas que se pierden en el aire. O el cuerpo quieto dejando las extremidades, solo las manos, llevando la acción. Blanco y negro son los colores. El escenario poco iluminado. Aunque en el día de la puesta hubo más luz de lo usual.
Hay dos tipos de música que de terminan el ambiente: Primera parte la música del compositor György Ligeti le confiere un acento austero y serio. En la segunda, Ray Charles, nos da la nota “swing”. En la tercera vuelve Ligeti, pero más ligeramente que en la primera parte: queda algo de lúdico y eso se agradece.
“Double You” de Jirí Kylián fue creada en 1994 para el bailarín del NDT 3, Gary Christ. En esta ocasión el solo es ejecuatado por Medhi Walerski. Son doce minutos, íntimos y poéticos. Walerski, que trabaja en el NDT desde 2001, sabe captar el espíritu del maestro Kylián.
Otro estreno a cargo de Crystal Pite, coreógrafa asociada del NDT. “Solo Echo” es simplemente una reacción en movimiento a dos sonatas para piano y violonchelo de Johannes Brahms. Dejarse llevar por las notas sublimes de este compositor… Sí, Pite misma lo admite: «Les leí además una poesía sobre un personaje que se pasea en el intenso frío del invierno, pero sonríe porque está contento consigo mismo. Cómo no inspirarse por tal texto y la música de Branhms? Muy fácil». Pero no es un solo los veinte minutos que dura la obra. Hay solos, duetos y escenas de grupo de siete bailarines: cuatro de ellos y tres de ellas. Todos de NDT 1.

Dejar un comentario