La Escuela Nacional de Ballet de La Habana presenta a sus profesores y alumnos de distintos niveles formativos en eventos internacionales.

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Las autoridades cubanas responsables de la enseñanza artística en el país y los rectores de su afamada Escuela Nacional de Ballet (ENB) convocaron a la prensa, recientemente, con el objetivo de proporcionarle una información casi silenciada por los medios, acerca de la proyección internacional de la institución docente y de sus educandos en la difícil carrera del ballet.

La vicedirectora de especialidades, Marta Iris Fernández, informó ampliamente sobre la participación de profesores y alumnos de distintos niveles formativos en eventos internacionales, y los lauros conseguidos por ellos en aquellos de carácter competitivo. Por ejemplo, se destacaron en el Segundo Encuentro de Danza del Mediterráneo, con sede en la ciudad italiana de Calabria; el pasado julio asistieron a un encuentro metodológico y a un concurso, en forma de intercambio entre italianos y cubanos. Posteriormente, su ejecutoria en el Premio de Roma y en el de Vignale Danza en Torino, les permitió retornar a su país cargados de preseas, obtenidas por Marisel Fumero, Steisi Menéndez, y Randy Crespo (con la experta asesoría del maestro de maestros Fernando Alonso). Los ganadores ya fueron invitados al 8vo Concurso de Roma en 2009.

Muy apreciadas por los concursantes, provenientes de diversas escuelas de ballet del mundo, son las becas o bolsas de estudio ofrecidas por la Escuela Cubana de Ballet para perfeccionarse por dos meses en la misma, o una bolsa de participación en el próximo Encuentro Internacional de Academias de Ballet en la ciudad de La Habana, en el verano de 2009. En esa misma temporada, dos parejas de estudiantes de la ENB bailarán, como invitadas, en el Ecuentro de danza del Distrito Federal de México, con la posibilidad de presentaciones en diferentes plazas de ese país.

Al II Concurso internacional de ballet de Beijing han sido elegidos para competir los jóvenes bailarines Osiel Gouneau (de brillante desempeño) y Daniela González-Peraza (de precisión y elegancia), ambos preparados por la profesora Ana Julia Bermúdez. El primero se destacó en la edición XXIII del Concurso de ballet de Varna, Bulgaria, donde obtuvo la Medalla de plata en la categoría “junior” (el primer premio masculino quedó desierto). Vladimir Vassiliev fue presidente del jurado en esta oportunidad, y su alta valoración de los cubanos (impresionado por sus ejecuciones de múltiples giros), motivó que fueran invitados a bailar en Rusia. Cuba participó en doce ediciones de Varna, y ha ganado 24 premios. Este año compitieron artistas de 22 países.

El talón de Aquiles de los cubanos sigue siendo el tema de la coreografía contemporánea que llevan a los encuentros competitivos. La propia profesora Marta Iris Fernández criticó la falta de osadía, de atrevimiento en la creación de las piezas, así como un desconocimiento del “up-to-date” de las tendencias internacionales. Es, pues, una urgencia aceptada el impulsar en el país la contemporaneidad en la danza.

El XIV Encuentro internacional de academias para la enseñanza del ballet se efectuará durante los feriados por la Semana Santa de 2009, y tendrá variantes en su formato, los cuales se informarán oportunamente. Y en cuanto al ámbito nacional, anunció la formación de una “brigada” artística de la ENB que bailará para los damnificados de los huracanes Ike y Gustav en los afectados territorios occidentales del archipiélago cubano.

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